El nombre del susodicho es Paco Cañero, representante de joyería felizmente jubilado, con 73 primaveras de vida a sus espaldas.

El buen hombre tenía un quiste en la próstata, el cual había que quitar con urgente o perentoria necesidad para que no derivase en un cáncer.

Los mejores regalos de cumpleaños patrióticos: Obsequios de España

El buen señor tenía que someterse a 36 sesiones diarias de radioterapia, con una duración de 15 minutos minutos por unidad. Hagan números y pongan un cronómetro.

Firma aquí para apoyar a Amancio Ortega

Un buen día, tuvo la suerte, fortuna, dicha y ventura de toparse con una gigantesca máquina donada por Amancio Ortega, mastodóntico cachivache, con forma de platillo volante, con el que le vino Dios a ver.

Se venden pulseras, pines y lazos de la Bandera de España por 1, 2, 5 y 7 euros

Paco describió la máquina como una “maravilla”.

Vota aquí a favor de que Amancio Ortega done contra el cáncer

Y cuando se enteró de que era una donación de Amancio Ortega, apostilló exultante y henchido de alborozo: “Habría que hacerle una estatua a este hombre”.