Columnista: Plácido Díez Gansert, autor de 8 novelas y experto en crítica literaria
También, puedes escuchar el artículo en este audio
Dado que nuestro confinamiento parece que va para largo, voy a sugeriros, para este mes de abril, una novela de espionaje y saludable escape del anglo indio Ruyard Kipling, considerado en su época como vocero de las virtudes del imperialismo británico.
Si bien es cierto que algunas de sus obras están envueltas de carga moralizante, no lo es menos que el virtuosismo de sus letras es indiscutible, por lo que fue galardonado en 1907 con el Premio Nobel de Literatura.
Kim, la célebre obra de Ruyard Kipling
Me gustaría proponeros una de sus obras más célebres. Me refiero a Kim, publicada en 1901, en la que narra los lances de un niño que zascandilea por las calles de Lahore, en el norte de la India, entre la picaresca y la mendicidad.
En esto, que conoce a un anciano lama, con el que traba amistad y se convierte en su monaguillo.
Hijo de un coronel británico y envuelto en una trama de espionaje
Poco después, un oficial inglés descubre que Kim es hijo de un coronel británico y le enrola para formar parte del Gran Juego, servicio de espionaje alrededor de las disputas por el reparto de Asia entre Inglaterra y Rusia.
La novela, además de encerrar una gran tensión, describe ingeniosamente el contraste entre la pulcritud los valores de Inglaterra colonial con el crisol cultural del subcontinente indio, y con el paso del tiempo ha sido reconocida como una de las joyas de la literatura inglesa.