Autor: Pelu Crespins
Antes, nos partíamos el lomo batallando doctrinas heréticas calvinistas en Flandes y hoy en día, nos partimos el alma por ascender en sus multinacionales.
Antes, después de cenar (si el puchero daba sí) corríamos a la taberna más cercana a ponernos ciegos de vino; ahora, después de cenar tenemos que tender nuestros calzones.
Antes, el atentado contra la honra se dirimía en singular duelo a espada toledana, ahora, se pone una falsa sonrisa al jefe o al compañero de trabajo.
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Antes, tener una cicatriz en medio la cara era sinónimo de hombría y pundonor, hoy en día, se considera políticamente incorrecto y no queda bien de cara al cliente.
Los chivatos de antaño acudían al Tribunal de la Santa Inquisición, hoy en día, acuden, a Recursos Humanos.
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Antes, los poemas de Quevedo contra Góngora eran el campo de batalla lingüístico, hoy en día, los debates de Sálvame o de Gran Hermano.
Antes, se conquistaba a una dama con puro y límpido poema, hoy en día, con una foto con el pecho depilado y de gimnasio en el Tinder.
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Antes, se liberaba el estrés dirimiendo sempiternas guerras contra franchutes y piratas, hoy en día, uno se marcha a correr al Retiro.
Antes, los trovadores ensalzaban las grandezas del imperio con sus cánticos armónicos, hoy en día, llega la venganza de Moctezuma con su reggaeton.
Sin embargo, el sustrato hispánico subyace y la sátira prosigue y aquí este humilde escritor, Pelu Crespins, prosigue con tan noble y loable quehacer; esquemático, temático y abreviado, adaptado a los tiempos actuales.